En este bloque hemos hablado de cuentos los cuentos folclóricos y de las características que poseen estos textos con respecto a otros como pueden ser los textos de autor.
En primer lugar he de mencionar que los textos folclóricos son textos de tradición oral, es decir, son textos que se han ido transmitiendo de una persona a otra y de un siglo a otro mediante la vía oral. Por lo tanto, como son textos de cultura tradicional no tienen Copi Right
Cuando hablamos de estos textos nos encontramos con una serie de características que le diferencian de los demás.
· Los textos folclóricos no tienen autor, sin embargo, no podemos caer en el error de considerar que sean anónimos ya que poseen características que los diferencian de este grupo. Por esto, decimos que el autor de estos textos es el tiempo.
· Presentan una gran cantidad de variantes debido al paso oral de una persona a otra y de las adaptaciones que ha sufrido.
· También son conocidos como cuentos del hogar o al calor de la lumbre ya que son de una literatura del pueblo. Es decir, las personas del pueblo cuando acababan de hacer sus tareas se sentaban alrededor de la cocina y se contaba historias que habían escuchado o que les habían enseñado las ancianas. Todas estas historias, tenían enseñanza para todos los miembros de la familia y los temas podían ser el amor, el terror, tema sexual, de guerras, etc.
· No tienen moraleja ya que en principio se contaban para entretener, sin embargo, nosotros les creamos una moraleja.
· En los cuentos se reflejan algunas costumbres de las gentes de otra época (Por ejemplo: En Hansel y Gretel tenían unos 12 años cuando su madre les dijo que se fueran de casa a buscarse la vida porque no tenían dinero. Esto era algo muy normal en el Siglo XIX aunque hoy en día, esta idea parece incomprensible).
· Son historias o cuentos que expresan los deseos, sueños y miedos de la gente de la época. (Por ejemplo, Aladín es una historia donde un chico de pueblo se convierte en un príncipe, este era un deseo de muchos de ellos).
· Las historias están llenas de símbolos debido a que se quería expresar como he dicho anteriormente los sueños, miedos, deseo, etc. de las personas (Un ejemplo de símbolo es que en casi todos los cuentos los protagonistas deben abandonar su casa. Otros símbolos pueden ser el amor a simple vista como en el caso de Cenicienta y el Príncipe o las hadas quienes siempre te proporcionan ayuda).
· No son cuentos machistas sino que son cuentos que reflejan la época de donde fueron transmitidos.
Los textos folclóricos, han pasado de generación en generación a través de la vía oral hasta que unos recopiladores deciden recogerlos y dejarlos por escrito. Unos de los recopiladores más famosos son los hermanos Grimm.
Al pone por escrito estos textos, se llega a una serie de ventajas como que pueden ser conocidos y por tanto pueden extenderse más y no sólo quedarse en una tradición familiar. Aunque encontramos un inconveniente no demasiado grande que es la fijación del texto. No obstante aunque el texto este fijado se sigue haciendo versiones diferentes (Por ejemplo, Disney hizo una versión de Blancanieves distinta a la de los hermanos Grimm ya que en su historia la madrastra intenta asesinar tres veces a Blancanieves y en la de Disney sólo dos).
Con los textos folclóricos debemos tener en cuenta cuáles son los que mejor se adaptan a los niños mientras que con los textos de autor sólo tenemos que tener en cuenta cuáles son los más correctos.
Una idea que no podemos dejar pasar por alto, es que los cuentos folclóricos no son cuentos infantiles aunque se contarán también para niños debido a que al ser del pueblo tenían un lenguaje muy sencillo y poseían personajes planos (personajes con una o dos características).
En cuanto al teatro folclórico, nos encontramos ante dos partes: El teatro dramático y la representación. No existen textos escritos pero si textos orales.
La forma de transmitir la historia es de manera oral debido a la inexistencia de textos y más tarde, esta historia se representaba sin necesidad de que existiera un texto para aprenderse.
El teatro folclórico popular está muy relacionado con la religión y a día de hoy, sigue siendo común que en los pueblos se represente la Pasión de Cristo, El belén viviente, etc.
Por otra parte, también nos encontramos con representaciones erótico-festivas donde se simulaba el acto sexual. Estas representaciones se solían hacer sobre todo en Carnaval y en las plazas de los pueblos.
Otro tipo de teatro folclórico es que protagonizado por los “Cómicos de la legua”. Éstos eran personas con cierto nivel cultural que iban por los pueblos con un carro haciendo representaciones teatrales donde se hacían pequeñas historias, canciones, bailes, etc. hasta finales de la Postguerra.
Los “Cómicos de la legua”, tenían obras muy cortas llamadas los “títeres de Cachiporra” para los niños. Las obras tenían el mismo argumento y se representaban con marionetas de mano por lo que los cambios existentes entre las obras se hacían por las marionetas.
El argumento de todas era: El protagonista se presentaba ante el público diciendo que había algo que quería muchísimo (una dama, un caballo, una espada, etc.) y entonces, el personaje malvado le arrebataba eso que amaba y al pobre protagonista le tocaba recuperarlo sirviéndose de los niños para hacerlo. Esta es la única representación folclórica para los niños.
Respecto a la poesía folclórica, existe muy poca y siempre está relacionada o unida a la música y al juego.
En la poesía folclórica nos encontramos con la poesía amorosa cantada por la gente del pueblo, la cual se une a la música (primer cancionero: La cantigas laico-portuguesas) y a la poesía folclórica unida al juego (canciones cantadas para jugar). Aunque como hemos visto anteriormente, la literatura folclórica no es para niños. Precisamente, es en la poesía donde nos encontramos manifestaciones infantiles para cantar y jugar.
En la poesía religiosa nos encontramos con oraciones y nanas para niños. El origen de estas oraciones o nanas no es religioso sino pagano, es decir, estas oraciones eran una especia de protección mágica para evitar que los niños sufriesen una muerte súbita o una desaparición porque les habían secuestrado. (Por ejemplo: La oración de “Jesusito de mi vida”, o “cuatro esquinitas tiene mi cama”).
Es importante que distingamos entra poesía popular y poesía tradicional ya que a menudo caemos constantemente en el error de colocar una poesía popular como puede ser “Mi barba tiene tres pelos” de Emilio Aragón (Padre) en una poesía tradicional porque no nos acordamos o desconocemos quién es el autor. Esto se puede producir porque se ha popularizado tanto que se ha acabado por desconocer el autor.
Por lo tanto, la poesía popular es aquella que está de moda y tiene autor, mientras que la poesía tradicional o folclórica no tiene autor y se transmite de “boca en boca”.
Como futuros maestros de Educación Infantil, debemos ser los guardianes de las poesías unidas a los juegos (Juegos de pasillo) y de las canciones de tradición folclórica (canciones para jugar a la comba) ya que se pueden perder.
Una de las personas que más se ha interesado por este tema es Pedro Cerrillo, profesor de la Universidad de Castilla la Mancha, el cual realiza una clasificación de los textos en:
· Rimas de Ingenio: No tienen música, se recitan o en todo caso son retahílas. Una retahíla es una melodía compuesta por dos, tres o cuatro notas que se repiten todo el rato (Por ejemplo: “Una dola, tela catola, quila quilete”; “Pito pito gorgorito”; “quien fue a Sevilla perdió su silla, quien fue a León perdió el Sillón”; etc.). También hay rimas de ingenio de trabalenguas, adivinanzas, burla, prenda, etc.
· Rima de movimiento y acción: Acompañadas de movimiento de manos, pies, etc. También canciones para mover a los bebés, balanceos, cosquillas, risas. (Ejemplo: “Pase misi, pase misa, por la puerta de Alcalá, los de adelante corren mucho, los de atrás se quedarán”).
· Danzas de coro: Juegos de palmas, coros, saltos, giros, juegos de imitar, etc. (Ejemplo: Al corro de la patata).
Los textos folclóricos en prosa son cuentos o relatos breves. En general, no habían interesado nunca a los críticos ya que decían que no tenían calidad por su carácter popular.
Si cogemos el poco interés que existía por los textos folclóricos y la tardía aparición de la literatura infantil surge la idea de para qué usar estos textos. Cuando llegó la ley del 70 y se instauró el preescolar (guardería), el cual no tenía currículo, las maestras pensaron cómo podían trabajar algunos aspectos entre los que se encontraba la lectura y como no había cuentos para niños pequeños ya que nos se les tenía en cuenta, se empezaron a usar los cuentos folclóricos ya que se podían modificar, tenían personajes planos y era aparentemente historias sencillas.
Como dato me gustaría resaltar que ya a mitades del Siglo XX, una de las grandes factorías, Disney, empezó a interesarse por estos cuentos folclóricos y comienza a hacer algunos cortometrajes como “los tres cerditos”.
Sin embargo, no fue hasta 1945 cuando saca su primer largometraje sobre el cuento folclórico de “Blancanieves” inspirándose en la versión de los hermanos Grimm aunque adaptándola ya que debía durar como máximo una hora y debía ir destinada a todo tipo de edades.
En la primera etapa de Disney, tras sacar al mercado “Blancanieves” y ver el éxito que había tenido decidió sacar otros dos cuentos folclóricos: “La Cenicienta” y “La Bella Durmiente”. También sacó al mercado “Aladín”, “La sirenita”, “La bella y la Bestia”, entre otros.
Sin embargo, no debemos caer en el error de considerar que todos los largometrajes sacados por Disney son cuentos folclóricos ya que por ejemplo “El libro de la selva”, “Peter pan”, “Dumbo”, “Alicia en el País de las maravillas”, etc. no son cuentos folclóricos ya que son cuentos escritos por un autor.
A partir de esto, en el Siglo XX, se empiezan a hacer famosos y a ponerse de moda los cuentos folclóricos, y es precisamente en este Siglo cuando se comienzan a analizar e investigar este tipo de textos.
Muy bien.
ResponderEliminar- Hay que argumentar y ejemplificar eso de que los cuentos folclçoricos no son machistas. Yo le dediqué bastante tiempo porque es uno de los temas más actuales sobre este tipo de textos.
- Dices: "Con los textos folclóricos debemos tener en cuenta cuáles son los que mejor se adaptan a los niños mientras que con los textos de autor sólo tenemos que tener en cuenta cuáles son los más correctos." FALSO.
- Los ejemplos que citas de Disney como no folclóricos, no son cuentos. Peter Pan es una obra de teatro. Los demás son novelas. Puedes hablar, si quieres, de "textos" y así se agrupan todos.